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Me canse de la Iglesia.

Foto del escritor: Victor RubioVictor Rubio

Hola, Soy Victor Rubio

Si estas viendo esto es por que me conoces o algo así, pero por si no déjame contarte un poco sobre mi, antes de entrar al tema del titulo de la entrada de esta semana.


Tengo 24 años, Soy de Hermosillo, Sonora (La ciudad del sol), y nací en lo que se le denomina como "cuna cristiana" es decir: dentro de una familia cristiana.

Mientras crecía no había domingo que no fuera a la iglesia dado a que mi papá era Director de Alabanza, entonces teníamos que ir todos los domingos y miércoles y demás días que hubiera servicio.


Yo comencé a involucrarme en la alabanza cuando tenia 14 años, y desde ese momento no pare por 10 años y aun sigo involucrado, entre ensayos y días de servicio mi semana era estar en la iglesia casi todos los días, mi circulo social era gente de la iglesia, mis amigos eran gente de la iglesia, y mis temas principales eran sobre iglesia. ¡LA IGLESIA ERA MI VIDA!


Después de tantos años en la alabanza comencé a ser parte de diferente ministerios al mismo tiempo, Creativo, Producción y demás cosas. En verdad estaba demasiado metido en eso y lo disfrutaba y lo amaba con todo mi corazón, amaba desvelarme pensando en ideas para hacer en mi grupo, amaba leer y leer libros sobre liderazgo y creatividad para prepararme mejor.

¿Entonces como fue que me canse? Como en todo hay un lado bueno y lado malo, y si, la iglesia lo tiene. Y si, yo también lo tengo. Nunca he sido conocido por hacer las cosas de la mejor manera y siempre encuentro la manera de autosabotearme cuando todo va bien, en los últimos años comencé a vivir una vida conforme a mis convicciones y no conforme a lo que la gente quiere que viva y eso es algo bueno pero peligroso hasta cierto punto porque si tus convicciones no son firmes pueden llevarte a vivir una vida que no le agrada a Dios, y mis convicciones eran fuertes en algunas cosas pero no en otras y eso daba mucho de que hablar.


Y puedes decir pues la gente siempre va a hablar y la verdad es que si, siempre hablaran aveces con verdad y aveces con mentira pero siempre hablaran, y al final eso me fue consumiendo, pir chismes, escuchar que esta persona dijo esto y aquello, y que es verdad que hiciste esto o lo otro, que subiste esto a tu twitter o no y comencé a desgastarme, a tal grado que dije: Yo ya no quiero estar aquí. Muchas veces la embarre feo y me disculpe por hacer lo que hice y luego vienen las consecuencias de tus acciones y eso se entiende, Pero no podía entender que las personas que debían de amar y aceptar y consolar y ayudar, eran los primeros en alejar, juzgar, chismear y eso simplemente me rompió.


Ahora bien yo mismo he juzgado sin saber y aun sabiendo pero tengo algo que la considero una virtud, no me clavo mucho en la vida de las demás personas entonces haya ellos con sus problemas y su relación con Dios. Volviendo al tema, todo eso hizo que comenzara a dejar de disfrutar la iglesia, hizo que perdiera amistades (o que yo consideraba que eran amigos), e hizo que odiara a personas.

Aveces el problema es que no miramos el daño que las palabras hacen por que son eso solo palabras, pero muchas veces esas palabras duelen mas que un golpe y quedan mas marcadas que una cicatriz.


OJO NO TODOS LOS CRISTIANOS SON IGUALES


Comencé a generalizar con que todas las personas era iguales y poco a poco me di cuenta que no. Una vez un gran amigo me dijo: "Los cristianos no son malos/Las personas si" Eso quiere decir que todas las personas fallan, algunos juzgan y otros aman, algunos mienten y otos dicen la verdad, a algunos les importas y a otros no, y esa es la belleza de la iglesia, un lugar lleno de gente diferente, lleno de imperfecciones, lleno de heridas, PERO también lleno de unidad, lleno de gente buscando un solo propósito: encontrarse con Dios, un lugar lleno de gente siendo sana espiritualmente y emocionalmente.


Y eso era algo que siempre escuchaba pero es muy diferente ESCUCHAR a ENTENDER y cuando en verdad lo entendí comencé a sentir amor de nuevo a la iglesia.


Hoy en día estoy entiendo que la iglesia se puede equivocar y que las personas pueden decir o no decir, pero aquí lo único que importa es lo que Dios esta diciendo tanto de la iglesia como de nosotros. Al final somo una creación imperfecta, creados por un Dios perfecto. A lo mejor tu haz pasado por algo similar, o estas pasando por algo así, me encantaría poder platicar contigo sobre el tema, en mi inicio esta mi instagram, mandame un mensaje con confianza.


Este soy yo.

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