¿Te acuerdas de lo que querías ser cuando fueras grande?, yo si, quería ser futbolista profesional y llegar a jugar para el poderoso Real Madrid, por mucho tiempo jugué fútbol desde la primaria hasta la prepa, y la verdad no era malo, tenía mucho potencial, fui hacer pruebas a Guadalajara con Chivas, estuve en la Selección Sonora, Estuve en Selección de Mexico en un torneo, salía en el periódico, en un comercial de telemax (eso ya es ser pro), en pocas palabras podía haber llegado lejos.
¿Y qué fue lo qué pasó?, me autosabotee, llegue a la prepa y el fútbol quedó en lo ultimo de mis prioridades y mi sueño de ser el mejor jugador Mexicano murió junto con mi rodilla y mi condición, sueño #1 abandonado.
En la prepa me di cuenta que tenía talento para la música y comencé a meterme de lleno en la música, componiendo, aprendiendo, tocando varios instrumentos y demás, pero siendo sinceros no hay mucha complejidad en las canciones cristianas entonces poco a poco mi pasión por sobresalir en lo musical fue disminuyendo, mi amor por escribir canciones también fue disminuyendo, y mi sueño de poder alcanzar a muchas personas con mis canciones murio junto con la libreta en la que las escribía. Sueño #2 abandonado
Y por último y el más importante, en mi etapa de universidad Dios puso en mi un fuerte deseo de servirle más de lo normal, deje mis estudios, deje mi ciudad y mi familia y decidí irme a perseguir ese sueño y te digo algo: ¡LO LOGRE!, estaba viviendo el sueño sirviendo tiempo completo, trabajando tiempo completo en la iglesia, y como tengo por costumbre me autosabotee una vez más. Y este sueño se quedó en Stand-by.
Después tuve la oportunidad de realizar otro de mis sueños, ser líder de jóvenes en un grupo que amo y que llevo en mi corazón, en el tiempo que estuve di mi todo, mi tiempo, dinero y esfuerzo lo dedicaba 100 % al grupo, a algunas personas no les gustaba mi manera de trabajar y algunas si, no les puedes caer bien a todos, el caso es que igual lo deje y este sueño quedó en Stand-by
Comencé a trabajar y generar ingresos, por qué pues uno tiene que ganar dinero si no ¿de que va a vivir?, y comencé a establecer mi vida laboral en un empleo de oficina, mis actividades en la iglesia de ser mi prioridad pasaron al segundo o tercer lugar, pero no por qué yo quisiera sino por qué no veía que se abrieran puertas para poder cumplir todos estos sueños que tengo.
Y algunos me dicen es que tienes que trabajar mas en ellos, y mi respuesta es: he dedicado años de mi vida trabajando en ello ¿qué más quieres?, otros dicen: es que a lo mejor no es lo tuyo y mi respuesta es: es verdad a lo mejor no es lo mío. Veo como muchas veces se las da oportunidades a alguien que sinceramente no se las merece y que a gente que moriría por estar haciendo ese trabajo jamás se le toma en cuenta (si ese soy yo), y la verdad es que si me da mucho coraje ese tipo de cosas, eso no debería de pasar, pero lamentablemente pasa, las conexiones personales, amistades, familiares muchas veces son más importantes que buena calidad en el trabajo.
El caso es que llegue a un pensamiento:
En qué punto de la vida tienes que decir al Carajo todo.
Y Dejar de vivir pensando en sueño y comenzar a vivir en la realidad que te toca.
Pues si, llegue a ese punto de quiebre en el que dije, ya no puedo estar persiguiendo sueños y tocando puertas, ni modo seré un Godin el resto de mi vida, iré a un horario de 8 a 5 pm todos los días, y los domingos iré a servir a mi iglesia, decidí que esa fuera mi vida de ahora en adelante, y que los sueños que tenia pues murieran y listo otro joven mas con sueños rotos por qué nunca vio que algo más pasara.
LOS CRISTIANOS Y SUS “ESPERA”
Hasta que platiqué con una amiga de la situación, y ella me dijo la famosa frase de espera, esa frase me tiene ¡HARTO!, no me gusta esperar quiero que las cosas sucedan rápido. Pero al mismo tiempo en que ella me dijo eso, Dios me recordó algo: Si yo puse esos sueños, yo los voy a cumplir, no importa cuando o donde sea, los voy a cumplir.
Rápidamente recordé la historia de José el soñador que había soñado con que sus hermanos se postrarían ante el, y todos se burlaban de él, después pasó a ser un esclavo, luego lo vendieron, luego fue arrestado, luego estuvo preso, ¿te fijas que todo lo que le pasaba lo alejaba cada vez más de cumplir su sueño?, hasta que un día después de muchas buenas y malas temporadas el sueño se cumplió.
Quiero que te quedes con esto, no importa en que temporada estés ahorita en tu vida, a lo mejor estás en la cárcel (emocionalmente hablando), estás estancado, y ves hacia el futuro y no ves que el futuro sea prometedor, quiero decirte que: No te rindas, no te des por vencido, no desmayes, No renuncies a tus Sueños, Aunque tengas 80 años Dios puede cumplirlos como se lo cumplió a Abraham, aunque tengas 15 años Dios puede cumplirlo como se lo cumplió a David, y para cuando ese pase tienes que estar listo, entonces no te rindas, y si te rendiste vuelve a tomar esos sueños de la basura y confía en que se realizarán. Aunque mucha sea la espera, confío en que veré cumplirse su promesa.
Este soy yo.
Creo firmemente que en el tiempo indicado todos encontramos nuestra silla correcta (Haciendo referencia a tu ultimo blog, lo leí justo cuando lo necesitaba porque es exactamente lo que platicaba con mi novia una noche anterior), esa que tiene nuestro nombre escrita en ella.
Algunos seguimos buscándola, hemos perdido oportunidades (oportunidades que anhelamos tanto y que en ocasiones son desperdiciadas en gente que jamas lo ¨merecía¨) aun así, el tiempo indicado llegara, aunque parece tardar.
Llevo tanto tiempo aferrándome a Salmos 138:8 ¨El Señor cumplirá su propósito en mi¨
Nuestro tiempo llegara, no tengo duda de eso, solo enfoquemonos en el ¨Hoy¨, ya que entre mas aprendamos de el ¨Hoy¨, mejor capacitados llegaremos a esa silla y mejor preparados estaremos…